RESEÑA DEL CREER Y DEL CRECER
Leer los periódicos ,ver noticias o notas relacionadas con
el cine ecuatoriano se ha vuelto una constante en los últimos años cada año son
más las producciones en cartelera llegando en estos últimos 4 años a la
escalofriante cifra de 3 a 4 producciones estrenadas por año. Por si acaso no
estoy siendo irónico viniendo de un país que no tiene precisamente una
tradición cinematográfica es un gran número si uno compara solo 15 años atrás
donde se tenía que esperar 3 o 4 años para ver el estreno de una producción
ecuatoriana.
Se dice que las primeras producciones empezaron en el
Ecuador en los 60 s con coproducción mexicana se lograron cerca de 10 películas
en el país. La primera se la llamó “Fiebre de Juventud”(Romance en Ecuador) ;
Enrique Guzmán y Fernando Lujan como actores estelares, honestamente vale la
pena ver esta película no tanto por los actores mexicanos o por la trama sino
por la aparición del inmortal Julio Jaramillo cantando “Sombras” esto convierte
a esta película en algo imperdible.
Retrocediendo el tiempo mucho más atrás encontramos quizá a
la primera película ecuatoriana realizada en el año de 1926 por el cura
italiano Carlos Crespi quien realizó en
nuestra amazonia el primer documental donde recogía: rostros ,voces, costumbres
y hábitos de vida de los Shuaras ;siendo en la actualidad un documento invaluable.
Resultado de sus múltiples filmaciones apareció:
“Los Invencibles Shuaras del alto Amazonas” un
film pionero en nuestra cinematografía.
Subrayo algunas
películas que se dieron con el paso de los años los “Hielereos del Chimborazo”
de Gustavo e Igor Guayasamín (1977) obra notable que quedará
para la posteridad. “Mi tía Nora” de Jorge Prelorán (1982), “La Tigra” de
Camilo Luzuariaga (1990) , “Entre Marx y una Mujer Desnuda” de Camilo Luzuriaga
(1996).
Llegó entonces 1999 y todo cambió para el cine ecuatoriano se estrena “Ratas, Ratones,Rateros” de Sebastián Cordero convocando a cientos de miles de ecuatorianos a las salas de cine, fué como un estruendo tremendo en medio de la noche donde el despertar NO fue de unos pocos ; esta película marcó un antes y un después del cine ecuatoriano estrenada en una época de profunda crisis económicas en el país, conviertirndola en un emblema que levantó la autoestima y generó identidad.
Llegó entonces 1999 y todo cambió para el cine ecuatoriano se estrena “Ratas, Ratones,Rateros” de Sebastián Cordero convocando a cientos de miles de ecuatorianos a las salas de cine, fué como un estruendo tremendo en medio de la noche donde el despertar NO fue de unos pocos ; esta película marcó un antes y un después del cine ecuatoriano estrenada en una época de profunda crisis económicas en el país, conviertirndola en un emblema que levantó la autoestima y generó identidad.
Diario EXPRESO 29 DE NOVEMBRE 1999 |
Desde entonces vivimos momentos
alentadores con gente que va sumándose a crear y creer en nuestro cine, el
trabajo de poco se lo reconoce y se lo recompensa ; número de rodajes
logrados en los últimos años habla de la buena salud de la producción
cinematográfica ecuatoriana. El 2009 se puede considerar un año histórico para la
cinematografía nacional ya que se estrenaron 9 producciones entre largometrajes
y cortometrajes.
Concursar en afamados festivales de cine, obtener
reconocimientos y distinciones a películas y actores nos hace sentir orgullosos
que el esfuerzo empieza a generar sus primeros frutos….que si es “bien pagado” o no,
ese es otro tema de análisis que en otra oportunidad lo haremos.
El futuro del cine en Ecuador estoy seguro que nos depara
muchas sorpresas agradables nuestros ojos se recrean viendo películas de las
grandes y automatizadas productoras de Hollywood donde la consistencia es casi siempre
la misma; por qué no volver la mirada hacia nuestros sueños, hacia nuestra gente,
hacia nuestra calle, hacia nuestra realidad, hacia historias que son tan cercanas a nosotros.
CINE ECUATORIANO un cine hecho a mano ; con mucho contenido, con bajos presupuestos,
elevado entusiasmo y en un nivel creciente.
Y este 2013 empezamos así
Mejor No Hablar (de ciertas cosas)